Hablamos de geopatía cuando el organismo de una persona recibe influencias de sobrecarga debido a ondas vibratorias que salen del centro de la tierra, o que van desde la atmósfera a la tierra. Estas ondas vibratorias le pueden ocasionar una enfermedad. Dicho lugar actúa como foco de sobrecarga o campo de alteración.
El cuerpo de la persona que se encuentre en una zona geopatógena está continuamente expuesto a bajos niveles de radiación, presentes en aquel punto. El efecto de esta radiación puede lesionar, destruir o modificar las células.
Antes de producir enfermedades graves, la radiación que se encuentra en los puntos geopatógenos agota los sistemas de regulación que posee el individuo, y a causa de ello aparecen diversas disfunciones y finalmente enfermedades. Por lo tanto, nuestra salud y bienestar van a depender del lugar exacto donde vivimos, sobre todo el lugar donde trabajamos o dormimos, debido a que en ellos permanecemos varias horas cada día.
Los trastornos que más frecuentemente pueden causar una geopatía, van desde insomnio, cansancio al levantarse, dolor de cabeza o de espalda al levantarse, dolores reumáticos, cansancio crónico, nerviosismo, irritabilidad, afectación al sistema inmunológico, estado de ánimo depresivo, esclerosis múltiple, enfermedades autoinmunitarias, enfermedades degenerativas, y muchos más.
Las dos principales geopatías fueron descubiertas por los médicos alemanes Dr. med. Hartmann y Dr. med. Curry. Son dos redes cuadriculadas que forman un vasto conjunto invisible en forma geométrica de dimensiones más o menos constantes y se extienden sobre toda la superficie terrestre, a miles de metros de altura en lo vertical.
La Red de Hartmann esta orientada según el campo magnético terrestre, en dirección Norte-Sur y en dirección Este-Oeste. Tiene un grosor entre 21 y 60 cm.
La Red de Curry, que concentra la radiación que emite la atmósfera hacia la tierra, tiene una orientación de NE-SO y NO-SE y tiene un grosor de unos 60 cm.
Estas dos redes lo atraviesan todo, tanto terreno, como edificios, plantas, animales y seres humanos. Los efectos patógenos de la Red de Curry son mayores que los de la Red Hartmann.